Los labios carnosos y definidos son símbolo de belleza y juventud, por lo que no es de extrañar que el aumento de labios sea uno de los tratamientos más demandados en medicina estética.
El aumento de labios se realiza con ácido hialurónico; esta sustancia se encuentra de forma natural en numerosos órganos y tejidos de nuestro cuerpo, pero con el paso de los años este se va perdiendo.
A diferencia de lo que muchos piensan sobre los rellenos con ácido hialurónico, esta sustancia no solo recupera el volumen perdido, sino que además hidrata desde el interior, ayuda a perfilar y mejora la calidad de la piel.
Entre los motivos de su gran demanda destacan:
- Lo sencillo de su aplicación
- No necesita periodo de recuperación
- Es reversible
La técnica y el producto que utilizan en la actualidad para el aumento de labios, poco tiene que ver con la de hace unos años atrás.
En la actualidad, los profesionales medico estéticos buscan la naturalidad y la armonía en el rostro, huyendo de los labios antinaturales del pasado.
¿Cómo se aplica en ácido hialurónico?
El ácido hialurónico se infiltra mediante pequeñas cánulas en pequeñas cantidades para minimizar la inflamación y la aparición de hematomas. Existen diferentes técnicas para hacerlo dependiendo de efecto que se quiera conseguir o las necesidades de cada labio.
El tratamiento dura entre 15-20 minutos y los resultados son instantáneos. Lo ideal es conseguir unos labios acorde con el rostro del paciente y la forma del labio, para lograr un aspecto que realce la belleza natural del paciente.
El ácido hialurónico tiene efecto inmediato, pero los resultados óptimos se observan desde la tercera semana posterior al tratamiento.
Tampoco precisa de hospitalización ni postoperatorio, por lo que una vez administrado, el paciente puede hacer vida normal con algunas limitaciones en la siguientes 24 horas:
- evitar la luz del sol directa
- evitar los baños con agua caliente
- los productos con retinoides
- el maquillaje
- el ejercicio físico
Al ser un material reabsorbible, los efectos son limitados. La duración mínima del tratamiento se sitúa entre los 8 y 12 meses dependiendo del paciente y del ácido hialurónico que se utilice.
Esta característica deja mucho más tranquilos a los pacientes, que sabes que pasado este tiempo volverán a estar como antes si no son capaces de adaptarse al cambio.
Si siempre has querido los labios un poco más gruesos o simplemente quieres hidratarlos o rejuvenecerlos te animamos con ello, pero siempre en manos de profesionales.
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