Con el verano no solo ha llegado el calor, también una alta exposición solar, lo que provoca un mayor envejecimiento celular.
Y es que, como pasa con muchas otras cosas, tomar el sol no es malo hasta que lo haces en exceso y sin ninguna protección. Por ello, comienzan a aparecer marcas en la piel denominadas manchas solares que son signo de una exposición prolongada al sol de nuestra piel.
Pero la aparición de manchas solares no es el único indicativo de esta mala praxis. En envejecimiento cutáneo es una de las mayores causas por las que la gente acude a centros de estética. La buena noticia es que existen tratamientos que ayudan a reducir esos símbolos del fotoenvejecimiento.
Cuando nos dicen que no es bueno estar a horas puntas como las 15:00 o las 16:00 tomando el sol, no es un simple dicho. Y es que, los rayos UVA y UVB son tan peligrosos que actualmente se les considera como la principal causa del cáncer en la piel.
Además, la radiación es responsable del desencadenamiento de procesos maliciosos de los radicales libres, lo que conlleva el deterioro de nuestras células.
Y os preguntaréis, ¿qué es un radical libre?
Pues bien, se trata de átomos que, al carecer de un electrón, tienen que ir en busca de él y, si lo encuentran en una molécula estable, lo roban. Consecuencia de ello es la pérdida de tono de la piel o las tan temidas arrugas.
Estos son los diferentes tratamientos que combaten este problema tan común en la población:
- El método HIFU se encarga de, a través de la energía ultrasónica, rejuvenecer la piel con resultados tales como el equilibrio del color y la estimulación de colágeno y de elastina. Se trata de una técnica muy eficaz y con grandes éxitos en personas que oscilan los 35 y los 55 años.
- Por otro lado os presentamos el tratamiento de láser fraccionado de CO2, basado en la vaporización de la capa superficial de la piel. Su principal función es la de reducir o incluso eliminar las arrugas y, al igual que ocurre en el anteriormente mencionado, aumenta la producción de colágeno y elastina.
- La radiofrecuencia fraccionada también se lleva la palma a mejor tratamiento contra el fotoenvejecimiento. Su principal objetivo es el de eliminar la flacidez y las arrugas provocadas por la radiación solar y el posterior envejecimiento de la piel. Una de las ventajas de este método es la obtención de resultados visibles con una sola sesión. La efectividad de esta técnica se muestra principalmente en personas de 30 años.
Aunque os hemos hecho un listado de los mejores y más efectivos tratamientos contra el envejecimiento celular cutáneo, actualmente existen muchos otros como los peelings o los resurfacing, ambos centrados en el fotorrejuvenecimiento, que consiguen grandes resultados y están muy demandados.
Una nota mental que deberíamos tener todos en cuenta es que la piel tiene memoria, y si no nos aseguramos de cuidarla como se merece, en un futuro sufriremos graves consecuencias.